Ordenado construir en 1503 por el entonces gobernador don Nicolás de Ovando, San Nicolás de Bari ha sido el primer hospital de República Dominicana o, más concretamente, de La Española.
Desde sus inicios funcionó como centro de salud y como iglesia. Comenzó siendo un modesto edificio realizado a base de madera y paja que posteriormente fueron sustituidas por elementos de mampostería, ladrillo y otros materiales de construcción más resistentes, gracias especialmente a las acciones de la cofradía de Nuestra Señora de la Concepción.
Junto con la iglesia de Santa Maria la Menor (1512) y la Universidad Autónoma de Santo Domingo (1538), los tres edificios constituyen los tres tesoros de la Ciudad Colonial.
En un primer momento la construcción se distribuía en tres naves, constituyendo la central una capilla, y las otras dos se destinaban a la atención de enfermos. Desde que en 1522 el hospital comenzase a funcionar, ha estado prestando sus servicios hasta mediados del siglo XVIII, siglo en el que fue definitivamente abandonado.
Aunque las ruinas fueron provocadas especialmente por un fuerte terremoto acontecido a mediados del 1900, en 1911 tuvieron que ser destruidos algunos de sus muros porque eran un peligro, por el riesgo de derrumbamiento, para los viandantes que paseaban por las inmediaciones.
Si decides acercarte de noche, observarás que las ruinas están iluminadas, produciendo una combinación de misterio y belleza.
Más información:
Ubicación:
Calle Hostos e/ Luperón, Zona Colonial. Santo Domingo. República Dominicana.
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